La tecnología es una de las patas más importantes de los negocios actuales. Por ello, las pequeñas y medianas empresas deben poner mucha atención e incluir parte de sus esfuerzos a reforzar su departamento tecnológico.
Según el informe "Panorama Actual de la Ciberseguridad en España", las amenazas como el ransomware, el phishing y el robo de datos están en constante crecimiento y no discriminan por el tamaño de las empresas. A menudo, las PYMEs no cuentan con protocolos adecuados para protegerse, lo que puede tener consecuencias devastadoras, desde la pérdida de datos críticos hasta el daño reputacional que puede comprometer su sostenibilidad.
El impacto económico de un ciberataque en una PYME puede ser desproporcionado, ya que muchas no cuentan con los recursos financieros o humanos para recuperarse rápidamente. Además, los nuevos marcos regulatorios, como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), exigen un mayor nivel de protección y sancionan fuertemente los fallos en la seguridad de los datos.
Por ello, la implementación de medidas de ciberseguridad no solo es una inversión en protección, sino en la continuidad del negocio. Desde la formación básica en seguridad para los empleados hasta la contratación de expertos en tecnología, cada paso en este ámbito es clave para mantener a las PYMEs a salvo en un entorno digital cada vez más hostil.
Además, parte de la solución está en mejorar la formación de los empleados y dotarlos de conocimientos para que puedan saber cómo actuar en caso de un ciberataque. "La educación y formación en seguridad digital son componentes esenciales para maximizar los beneficios de la digitalización. En un mundo cada vez más interconectado, la protección de la información y de los sistemas informáticos se vuelve crucial para el éxito y la supervivencia de las empresas. Es necesario impulsar programas de formación que ayuden a las pymes a comprender y aplicar correctamente estas tecnologías", comenta France Vidal, VP Legal & Compliance en Signaturit Group.
"Además, la alfabetización digital de los empleados no solo mejora la seguridad interna, sino que también incrementa la productividad y la innovación dentro de la empresa. Empleados bien informados y capacitados son capaces de identificar y mitigar amenazas potenciales antes de que se conviertan en problemas graves, lo que reduce significativamente los riesgos de ciberataques y pérdida de datos. Por otro lado, la familiaridad con las herramientas digitales y las buenas prácticas en seguridad informática permite a los empleados optimizar su trabajo diario, aprovechar mejor los recursos tecnológicos disponibles y desarrollar nuevas ideas y soluciones que pueden darle una ventaja competitiva a la empresa", continúa Vidal.
Por lo tanto, las pymes aún tienen un largo camino que recorrer y ya conocen los problemas a los que se enfrentan para ponerle una solución.