Un grupo de personas trabajando y colaborando en una oficina moderna con laptops y tabletas.

La brecha de género también se implanta en los puestos directivos en comunicación

Así lo refleja un informe elaborado por la Universidad Complutense de Madrid

Un reciente informe de la Universidad Complutense de Madrid pone de manifiesto las notables diferencias en las condiciones laborales que experimentan los directores y directoras de comunicación (Dircom) en España, reflejando una situación que, aunque mejora en algunos aspectos, sigue marcada por brechas de género en acceso y remuneración.

El estudio, basado en datos recabados en el ámbito empresarial español, revela una clara disparidad entre hombres y mujeres que ocupan puestos directivos en el sector de la comunicación. Una de las conclusiones más destacadas es que los hombres directivos perciben salarios significativamente superiores a los de las mujeres, lo que evidencia la existencia de una brecha salarial persistente. Este hallazgo, por sí solo, subraya las desigualdades de género que aún prevalecen en el ámbito profesional, especialmente en posiciones de liderazgo.

Diferencias salariales

Los resultados del informe señalan que los hombres en puestos de Dircom ganan en promedio más que sus compañeras. Aunque no se especifican cifras exactas, la tendencia apunta a una diferencia notable que refleja patrones más amplios de desigualdad salarial que se observan también en otros sectores. Estos resultados son consistentes con estudios previos en los que se documenta una disparidad salarial generalizada en el mercado laboral español, donde las mujeres tienden a ganar entre un 15% y un 25% menos  que los hombres en posiciones comparables.

El salario no es el único factor en el que se observan diferencias significativas. Las mujeres suelen tardar más en acceder a posiciones de liderazgo en comunicación, según los datos del informe. Mientras que los hombres tienden a ser promovidos a roles directivos a edades más tempranas, las mujeres a menudo ven retrasada su ascensión a estos puestos, lo que sugiere la existencia de barreras estructurales y de promoción que afectan de manera desproporcionada a las trabajadoras.

Acceso tardío a puestos de liderazgo

Este retraso en la promoción de mujeres a posiciones directivas es otro de los temas clave que aborda el informe. A pesar de que la presencia de mujeres en las altas esferas de la comunicación  ha aumentado en los últimos años, el acceso a estos roles continúa siendo más tardío para las mujeres que para los hombres. Las razones detrás de este fenómeno pueden incluir desde la falta de redes de apoyo y mentores hasta la persistencia de estereotipos de género que dificultan la percepción de las mujeres como líderes eficaces en entornos tradicionalmente dominados por hombres.

El hecho de que las mujeres tengan que esperar más tiempo para ocupar puestos de responsabilidad tiene repercusiones directas sobre su trayectoria profesional y su desarrollo personal dentro de la empresa. El acceso tardío también contribuye a la ya mencionada brecha salarial, dado que las mujeres acumulan menos años de experiencia en posiciones de alto rango, lo que impacta en sus niveles salariales globales.

Avances y desafíos

A pesar de estas diferencias, el informe señala algunos avances positivos. Las mujeres están comenzando a ganar terreno en términos de visibilidad y acceso a roles directivos en comunicación. Esto es alentador, aunque aún queda mucho camino por recorrer para garantizar la plena equidad en el sector. Los datos sugieren que la presencia femenina en los altos mandos está aumentando, aunque la velocidad y el ritmo de esta integración siguen siendo temas a debatir.

El reto para las empresas españolas, según se desprende de las conclusiones del estudio, reside en seguir promoviendo políticas que fomenten la igualdad de género en todos los niveles. El impulso de programas de mentoría, la creación de entornos de trabajo más flexibles y la promoción de una mayor transparencia en las escalas salariales podrían ser medidas clave para reducir la brecha entre hombres y mujeres en posiciones de liderazgo.